Cueva de Pichardo: Un tesoro natural latinoamericano

El guía de senderos del área protegida Limones- Tuabaquey, Yudiel Alarcón refiere que la gruta honra la memoria del prestigioso arqueólogo camagüeyano Felipe Pichardo Moya
Texto y fotos Lázaro David Najarro Pujol

Camagüey, Cuba.- La Cueva de Pichardo, ubicada en el Cerro Limones-Tuabaquey, área protegida perteneciente al municipio de Sierra de Cubitas, posee valiosas pictografías conservadas en un maravilloso paisaje entre salones naturales y árboles que crecen sobre rocas.
Por un sendero de tupida vegetación del llamado paso de la trinchera de Martín Castillo, en una ladera meridional de la colina, a 320 metros sobre el nivel del mar, ascendemos a la gruta que sobresale también por sus estalactitas y estalagmitas.
Junto al físico y arqueólogo francés Léo Dubal visitamos ese patrimonio universal. “La caverna fue utilizada por los aborígenes tainos probablemente para la celebración de calendario solar”.
Dubal quedó anonado al constatar el buen estado de conservación de las pictografías de la Cueva de Pichardo.
El investigador refirió que conoció de la existencia de la referida caverna en Cuba: Dibujos Rupestres, de Antonio Núñez Jiménez y añadió que siempre le interesaron estas pictografías, las cuales se mantienen intactas debido al círculo de conservación estricto, a uno 125 metros de altura. “Es sorpréndete obsérvalas; recorrer la galería y acariciar con las manos sus paredes. Es un sueño realizado”.
La Cueva de Pichardo posee las pictografías mejores conservadas de Latinoamérica
Son famosas y enormes pictografías de caretas a tamaño humano. Parecen que las acabaron de dibujar porque están en un sitio de acceso dificil.
El guía de senderos Yudiel Alarcón refiere que la gruta honra la memoria del prestigioso arqueólogo camagüeyano Felipe Pichardo Moya (1892-1957); Se localiza a unos 30 kilómetros al noreste de la ciudad de Camagüey.
“Los aborígenes no vivían en las cavidades de la Sierra de Cubitas, sino cerca de las costas y se trasladaban a realizar sus rituales, reflejados en pictografías que se encuentran en las paredes de la gruta”, dice el joven.
Posteriormente el presidente de la Fundación Antonio Núñez Jiménez de la Naturaleza y el hombre, en esta provincia, Eduardo Labrada nos aclara que la cavidad es horizontal y cuenta con dos galerías que se abren en ramal. Significó que desde el punto de vista geomorfológico distingue por ser la que está a mayor altura de las grutas existentes en la provincia de Camagüey.
La Cueva Pichardo, corroboró, sirvió como centro ceremonial de las comunidades aborígenes de la zona y sus pictografías representan una careta antropomorfa: un Dios mítico que está mirando al sur, en un punto culminante que domina toda la sabana, mientras que Léo opina que, el Behique es el shaman taïno.
El científico Antonio Núñez Jiménez (1923-1998), en su libro Cuba: Dibujos Rupestres. Industrial gráfica S. A., Lima, 1975, describía que en ese tesoro natural del Caribe y Latinoamérica “las pinturas están en el salón de entrada. Detalló que “la altura del primer salón […] mide unos doce metros y para llegar a los dibujos es necesario descender como cinco metros y luego subir por las paredes de la gruta hasta una especie de nicho donde están pintadas los enigmáticos símbolos, situados a 17 metros de la boca, que su vez mira hacia los llanos camagüeyanos con rumbo este-sudeste”.
Apuntaba Léo Dubal “Es extremamente interesante encontrar el mismo «dispositivo calendario» al otro lado del Atlántico. Podría también explicar la decoloración de una parte de la pintura”.
Los dibujos rupestres realizados por los aborígenes en la Cueva de Pichardo, fueron los primeros certificados en el siglo XX en Cuba y en el ámbito universal, mucho antes que las conocidas pinturas de la Caverna de Altamira, Santillana del Mar, Cantabria, España.
La Reserva Ecológica Limones Tuabaquey en su conjunto cubre un área de 19, 6 kilómetros cuadrados (1 960 hectáreas), unas 123 de dedican al uso público para mostrar a las personas que vistan ese tesoro natural de la mayor isla de las Antillas…

Pichardo Cave: Latin American Natural Treasure

Camagüey, Mar 14.- Pichardo Cave, located in the Cerro Limones-Tuabaquey, protected area belonging to the municipality of Sierra de Cubitas, has valuable pictographs preserved in a wonderful scenery between natural rooms and trees that grow on rocks.

Along with the physicist and French archaeologist Léo Dubal, we visited this world heritage through a footpath of dense vegetation.

According to Yudiel Alarcón, guide of the place, the cave honors the memory of Camagüey´s prestigious archaeologist Felipe Pichardo Moya (1892-1957).

The cavern, approximately 30 kilometers to the northwest of the city of Camagüey, was used by the aboriginal Tainos as a ceremonial place to adore their gods, to evoke spirituality and probably for the celebration of the solar calendar.

“The aborigines lived close to the coasts, but they moved to the cavities of Sierra de Cubitas to hold their rituals reflected in pictographs on the walls of the cave”, says the young man.

The French investigator recounted that he knew about the existence of the cavern through the references written by Antonio Núñez Jiménez in his book “Cuba: Dibujos Rupestres” (“Cuba: Cave Paintings”), at the time that he admitted the conservation state of the pictographs of the Pichardo Cave.

“It is surprising to observe them, to go over the gallery and to caress you’re your hands its walls. It is a dream realized”, added Dubal.

The president of the Foundation Antonio Núñez Jiménez of the Nature and the Man, in this province, Eduardo Labrada, explains that the cavity is horizontal and has two galleries that are opened in branches, so from a geomorphologic point of view, it is distinguished for being at the higher level than the other caves in the province of Camagüey.

The cave paintings realized by the aborigines in the Pichardo Cave were the first registered ones in the 20th century in Cuba and in the universal scope, well before the well-known paintings of the Altamira Cave in Spain.

The ecological reserve Limones-Tuabaquey as a whole covers an area of 19,6 square kilometers, of which approximately 123 hectares are dedicated to the public use to show one of the most visited natural treasures in this province.(Lázaro David Najarro Pujol)

Pichardo Cave: Latin American Natural Treasure

Un panorama hermoso
Paredes de un blanco intenso
Es sorpréndete obsérvalas con mis propios ojos, llegar y palmar con las manos las paredes de la cueva
Descender es más complejo que ascender
La Reserva Ecológica Limones Tuabaquey en su conjunto cubre un área de 19, 6 kilómetros cuadrados
La variedad de árboles maderables en su entorno que crecen sobre rocas


2 comentarios on “Cueva de Pichardo: Un tesoro natural latinoamericano”

  1. […] El conjunto de  siete cuevas y tres sitios naturales de esa región del norte de la provincia de Camagüey, ostentan  en la actualidad la condición  de monumento local y distinguen por la belleza natural. Además guardan el tesoro arqueológico y cultural de las pinturas rupestres indocubanas. […]

  2. […] El conjunto de siete cuevas y tres sitios naturales de esa región del norte de la provincia de Camagüey, ostentan en la actualidad la condición de monumento local y distinguen por la belleza natural; además guardan el tesoro arqueológico y cultural de las pinturas rupestres indocubanas. […]


Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.